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viernes, 17 de junio de 2011

Fiestas modernas: del rosa al verde

Foto: Blog Uniqevenues
En México, somos fiesteros, eso no se puede negar, y cada día parece que lo somos más o por lo menos que cada día nuestras fiestas se transforman de una simple reunión de amigos y familias a una súper producción de Disney o de alguna Casa Real. Las fiestas buenas, pensamos, tienen que ser abundantes, suntuosas, pomposas, espectaculares, rosas; hay que agasajar a los invitados con comida, bebida y muchos, muchos adornos y regalitos. Pero... ¿está el mundo todavía para eso?, ¿podemos soportar como sociedad el gran peso de nuestras celebraciones?, ¿cuánto le cuesta al planeta una de estas fiestitas?.

Pues bien, en una fiesta se generan 3 kilos de basura por persona (lo normal es 1 kg/persona/día); en un día de fiesta solemos ingerir el doble de calorías y grasa que en un día común y además en una fiesta gastamos de uno hasta cinco salarios mensuales. No cabe duda que hay que hacer un alto y atrevernos a a hacer fiestas diferentes, fiestas menos rosas y más verdes.

Aquí les dejo entonces los 10 aspectos a considerar para hacer una fiesta verde que te quiero verde:



1. Estás oficialmente invitado.
Olvídate de una buena vez del papel, la imprenta, de gastar gasolina y tiempo en repartir de casa en casa, ¡aprovecha la revolución tecnológica! Diseña una bonitas invitaciones en la computadora y envíalas por correo-e o haciendo uso de alguna red social como Facebook; puedes también crear una página de tu evento donde también recibas las confirmaciones de asistencia. A tus invitados que no son usuarios frecuentes de una computadora invítalos por teléfono y si insistes en las invitaciones usa papel reciclado y en vez de pases puedes elegir brazaletes o pulseras de tela que luego podrán seguir siendo usadas.

2. Los elegidos.
Lo idóneo es conseguir por algún medio que la gente confirme su asistencia pero si el tipo de fiesta o de invitados no te lo permite entonces calcula que al menos el 20% de la gente no asistirá y prepara todo para el 80% restante.

3. ¡A comer!
Nada más barato y sustentable que servir comida de origen local. Olvídate de la comida rápida suele ser muy cara y poco nutritiva. Prefiere servir platillos preparados con ingredientes de la región o incluso comida típica; será más barato y seguro que delicioso.
Para servir  usar loza que puede ser la propia o alquilada; la segunda opción es usar desechables biodegradables o de cartón, la tercera opción es usar desechables de plástico y lo que definitivamente hay que evitar es el unicel o poliestireno pues tarda en biodegradarse hasta 100 años y existen muy pocos procesos para reciclarlos.

4. ¿Qué te tomas?
Es mucho mejor y más barato servir aguas frescas preparadas en casa que refrescos. En el caso de servir cerveza prefiere la de barril o envases retornables. Compra sólo el hielo necesario y colócalo en un lugar en el que se conserve sin derretirse; si usas agitadores para bebidas preparadas compra sólo para que lo utilicen los que prepararan las bebidas, no le des uno a cada invitado pues muchos suelen terminar en la basura.

5. Lo bonito.
Los centros de mesa suelen representar un costo muy alto en todas las fiestas y en la mayoría de los casos terminan en la basura: flores, globos, adornos de papel, de unicel o de el ahora popular 'fomy'. Mejor coloca plantas en macetitas a las que les puedes colocar una etiqueta que diga por ejemplo: "Llévame contigo, soy un crisantemo, riégame todos los días, colócame a media luz..."; otra buena alternativa es hacer centros de mesa comestibles, puedes colocar por ejemplo arreglos frutales o charolas de fruta picada; puedes también colocar un platón muy bonito de carnes frías, quesos, semillas, aceitunas.

6. El que se mueve: no sale.
En la era de la fotografía digital no hay razón alguna para pedirle a un fotógrafo que tome e imprima 100 fotos de la cuales 50 o más quedarán abandonadas o en la basura porque no te gustaron. Usa la fotografía digital e imprime sólo las fotos que de verdad te agradaron y que quiera conservar en un marco.

7. ¡Mordida, mordida!
Piensa dos (o más) veces si de verdad vale la pena gastar en un pastel; observa bien lo que pasa con ellos en las fiestas a las que vas; muchos invitados no se lo comen, algunos por razones de peso, otros porque están ingiriendo bebidas alcohólicas y los niños porque la rebanada suele ser muy grande para ellos. Una buena alternativa son las barras de postres o bien servir dulces regionales en canastas, si no puede faltar la velita en el pastel puedes hacer uno pequeñito sólo para eso o para que los novios lo corten y servir un postre que guste más.

8. ¡Recuérdame!
Muchos recuerdos, bolos o aguinaldos son poco apreciados por los invitados; algunos son incluso olvidados en las mesas o tarde que temprano acaban viajando en el camión de la basura. Si quieres regalar algo prefiere algo comestible o bien de larga duración: ¿qué tal un brownie en una bolsita o unas galletitas?, chocolates es buena idea también, una maceitita con una planta, para los niños una lotería, un libro de colorear, un bote de masita para modelar... uff, hay cientos de alternativas de precio accesible y de gran utilidad.

9. Si de niños se trata.
Cuando la fiesta es infantil evita la sobredosis de dulces, solemos ponerlos en la piñata, en la bolsita que se les reparte a la salida, en las mesas, en fin. Muchos dulces son de muy mala calidad, de alto contenido en azúcar y algunos los niños nunca los comen y terminan pudriéndose; por ejemplo los caramelos. Para la piñata puedes optar por dulces más sanos y tradicionales como las obleas con cajeta, las palanquetas, las alegrías, las glorias, las natillas, los ates, los chocolates (los verdaderos no los dulces de grasa vegetal con sabor a chocolate); cuando los niños se vayan mejor dales un libro de colorear, crayolas, una lotería, un memorama. En la piñata también puedes poner pelotas, ligas del pelo, diademas, pulseras, carritos.
No es necesario contratar un payaso, un mago o todo un 'show', puedes montar tu mismo(a) un pequeño taller de manualidades recicladas, de decoración de galletas, de modelaje; no olvides además que los niños se siguen divirtiendo mucho con cosas muy básicas como una pelota. Puedes también invitarlos a decorar la fiesta a su llegada haciendo un cartel, evitarás los globos y serpentinas, los niños se divertirán y al final cada quien se lleva su obra de arte.

10. ¡Arriba los novios!
¡Qué gran gasto suele ser una boda y qué gran desperdicio de recursos! Además de los consejos anteriores puedes optar por un vestido prestado o alquilado, por mandar a hacer tus argollas con pedacería de otras joyas, por usar monedas viejas o de 10 centavos para tus arras. Prefiere las bodas de día, gastarás menos energía eléctrica y por favor evita a toda costa arrojar arroz o pétalos a la salida de la iglesia; opta mejor por las burbujas de jabón.
Mídete en la cantidad de arreglos florales que pongas; piensa siempre que arrancas las flores y luego las conviertes en basura; de nuevo la alternativa son las plantas florales que después seguirán viviendo.
Procura que la iglesia y el salón estén cerca, evita mover a todos los invitados largas distancias en coche.

Usa toda tu creatividad y seguro que se te ocurrirá mucho más que esto.

No pierdes nada con probar, al contrario ganarás unos pesos de ahorro y la satisfacción de haber festejado con conciencia sustentable.

1 comentario:

  1. Me encanta, Sofía, ya estoy poniendo en práctica muchas cosas para el próximo cumple. Creo que si te sigo me parecerán menos agobiantes las fiestas, porque por hacer mil tonterías que la gente lleva y todo eso, para la hora de la fiesta ya estoy muerta de cansancio. Bueno, muy bien!! Besos. Tu mamá

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